Por Aylet Morales Carmona
A pesar de su carrera beisbolera interrumpida por las constantes lesiones, Jorge Luis Barcelán ha obtenido significativos resultados dentro de la selección azul.
El arranque de la actual campaña beisbolera en Cuba ha traído buenas noticias para los seguidores de los leones capitalinos. Luego de cuatro subseries se colocan en la cima de la tabla de posiciones, compartiéndola con sus rivales históricos de Santiago, con un balance de siete victorias y tres derrotas. Resultado que han obtenido gracias a la magnífica forma física mostrada tanto por los lanzadores como los bateadores.
Justamente entre los toleteros que más se han destacado en las jornadas desarrolladas aparecen nombres de la talla de Yoandri Urgellés, Lisbán Correa, Yoassán Guillén y Jorge Alomá. Pero, a ellos se incluye Jorge Luis Barcelán, quien ha estado involucrado en la mayoría de los triunfos. Motivo de alegría para muchos de los aficionados que desde hace algún tiempo esperaban verlo en la mejor de sus facetas.
El “Torito”, como también se conoce, llega por duodécima ocasión a los terrenos de las Series Nacionales, en las cuales acumula .287 de average con 535 imparables de ellos 56 cuadrangulares. Estadísticas que alcanzó vistiendo las camisetas del extinto Metropolitanos, Huracanes mayabequenses y Leones habaneros.
Su inclinación por el béisbol la mostró desde edades tempranas, se desarrolló en las categorías inferiores y con 13 años ingresó a la Escuela de Iniciación Deportiva (EIDE). A partir de ese momento su paso por la pelota ha sido la típica historia de los jóvenes en este deporte, aunque con algunos matices accidentados que han limitado su participación en eventos internacionales.
Con el segundo equipo de la capital vio las puertas abiertas para incluirse en el máximo nivel de la pelota cubana en la temporada 48 (2008 – 2009), donde permaneció por cuatro años, hasta la desaparición del conjunto en el 2012. En ese periodo promedió .283 en 841 veces al bate, consiguiendo además, sumar mejor racha de jonrones en ediciones consecutivas con 28 (4, 13 y 1,1 respectivamente).
Igual que muchos de sus compañeros, se trasladó en la campaña 2012 – 2013 para la selección azul. Sin embargo, no resultó como hubiese querido y al siguiente año tomó la difícil decisión de jugar al béisbol en otra provincia que le permitiera tener un desarrollo regular en su alineación. En su caso fue la dirección de Mayabeque quienes le dieron la oportunidad.
Allí se mantuvo por cuatro temporadas y se convirtió, como se esperaba, en líder para el equipo que representaba. Debido al desempeño mostrado en cada jugada fue llamado por José Luis Rodríguez, manager de los Piratas de la Isla de la Juventud, para participar como refuerzo durante la edición 54, conjunto con el cual llegó a ser subcampeón.
En la serie 57 para satisfacción de los capitalinos, aparece nuevamente en la nómina de los Industriales. En esa ocasión regresó en una forma física espectacular, pues conectó seis cuadrangulares, impulsó 34 carreras y reunió un average de .335. Mientras que en su efectividad a la defensa se manifestó muy seguro y promedió .961.
La carrera deportiva del “Torito” Barcelán se ha visto interrumpida algunas veces, a causas de lesiones que lo han alejado de su participación durante campañas completas. Dos de las tres lesiones más preocupantes fueron jugando en Series Provinciales, la primera con la fractura de tibia y peroné y después con una hernia discal que le apareció al regresar del Torneo de Rotterdam en Holanda en el 2015, las cuales lo sacaron por un año de los terrenos.
Al término de la serie 57 sufrió la más reciente de sus contusiones cuando tuvo que ser intervenido quirúrgicamente en su brazo de lanzar, donde mantenía una molestia desde hace algunos años. Lesión que lo privó de vestir la camiseta del azul que traía nuevamente a Rey Vicente Anglada como manager.
La 59 vio incorporarse a un Barcelán en plenas condiciones de demostrar la fortaleza que siempre lo caracterizaba. Pero, los preparadores físicos prefirieron cuidarlo y lo alternaron en tercera base con su compañero Andrés Hernández, por lo cual en 198 comparecencias ante los lanzadores rivales promedió .222 de average.
Sin embargo, a la actual temporada, que aún es muy joven, ha llegado con una capacidad competitiva al cien por ciento, tanto sobre la tercera almohadilla como con madero en mano. Ahora solo resta esperar a que avance el certamen para que el “Torito” regale grandiosos momentos a quienes aman el deporte insignia cubano.