Por: Alejandro M. Abadía Torres
Germán Mesa constituye referente a la hora de contar la historia de la pelota cubana gracias a su habilidad de extraclase como defensor del campo corto.
Cuando se habla de los torpederos estelares que han desfilado por las Series Nacionales, Germán Mesa constituye referente obligado. Pocos defensores de la conocida posición seis pueden jactarse de un guante tan certero como el exhibido por “El mago” durante las 16 temporadas que jugó.
Germán debutó con Metropolitanos y defendió el campo corto de los Guerreros escarlatas hasta que decidieron pasarlo a Industriales, conjunto donde permaneció hasta su retiro y donde tejió una historia de amor incondicional a la camiseta, al tiempo que se ganó el cariño y respeto de la afición capitalina.
De por vida ostenta 4344 veces al bate, en las cuales pegó 1239 para exhibir average histórico de .285, con 112 jonrones. Gracias a sus cualidades defensivas, El Mago se retiró con promedio de fildeo de .964 y participó en un total de 850 jugadas de doble play, gran parte de ellos en una de las combinaciones short/segunda más espectaculares que han pasado por los terrenos cubanos y que protagonizó con Juan Padilla.
Debido a una desacertada decisión de los directivos del deporte, el estelar torpedero formó parte de aquel famoso retiro masivo y entre 1996 y 1998 no jugó más. No obstante, regresó nuevamente con el equipo de sus amores más aclamado que nunca por la afición hasta que, oficialmente, se retiró el 1ro de junio del 2002 ante su público en el Estadio Latinoamericano.
