De Industriales al equipo Cuba: Frank Camilo vuelve al béisbol

La incorporación de Frank Camilo Morejón al cuerpo de preparadores del equipo Cuba que participará en los Juegos Panamericanos Junior Cali-Valle 2021, sin lugar a dudas fue una gran noticia para el béisbol cubano.

Luego de una salida llena de polémicas, el histórico azul arriba a una preselección compuesta por figuras jóvenes, con mucho que aprender, razón por la cual se nutren de los conocimientos impartidos por el eterno 45 del equipo Industriales.

Trabajar el bloqueo de pelota, elemento fundamental en esta posición, y que en los últimos eventos fue deficiente, será tarea del ahora “profe”. Haciendo referencia a los problemas que más nos afectan en la receptoría hizo énfasis en la precisión de los tiros a las bases, en la acción de recibir y encuadre, y en el desarrollo de las capacidades físicas en los pupilos.

Morejón también comentó acerca de la necesidad de mantener la estabilidad de los receptores en la preselección nacional, favoreciendo de esta manera el crecimiento y entendimiento, entre las figuras de experiencia y las jóvenes del seleccionado cubano.

La receptoría para este evento, incluye a cuatro receptores, el matancero Andry Pérez, el pinareño Jorge Yoan Rojas, el villaclareño Ariel Pestano Jr., así como Pedro Pablo Revilla, máscara del equipo guantanamero. Para estos jóvenes adquirir experiencia de la mano de un talentoso receptor como Frank, será positivo de cara a sus compromisos venideros, nacionales e internacionales.

Este nuevo reto llevado a cabo por Frank Camilo, deja la incógnita, acerca de una posible presencia en el cuerpo técnico de la nave azul para la venidera serie, luego de una polémica salida que no fue bien acogida por la gran mayoría de los fanáticos del equipo Industriales.

De ser concretado su regreso, será un factor positivo para un equipo que en la actualidad, cuenta con figuras noveles en la posición 2, a los cuales Morejón pudiera, sin lugar a dudas, nutrir técnica y profesionalmente, con mucho béisbol y calidad humana, esa que siempre vió el aficionado en los terrenos de juegos, cuando saltaba a dejar ¨la piel en el terreno¨.

Por: Rafael Armada Hernández