Por: Gianluca Hernández León
Aunque natal de Granma, Marcos Ortega debutó en Series Nacionales con los Industriales de La Habana. Luego de un paso complejo por la República Dominicana el lanzador derecho regresó a la manada para vestir nuevamente el color azul que defendió antes de probar suerte en tierra quisqueyana.
Para Marcos Ortega, su paso por las categorías inferiores de nuestra pelota resultó un tanto tortuoso. Perder la oportunidad de desarrollarse como atleta por tener que asistir al Servicio Militar Activo representó una experiencia un poco amarga para él y su familia. Pero la perseverancia se premia y pudo llegar al equipo más importante del Beisbol cubano.
El serpentinero jugó en seis Series Nacionales antes de marcharse a la Tierra de David Ortiz en busca de un contrato que le reportara mejoras en los apartados económico y social de su persona.
Su paso por Dominicana no fue lo que Marcos esperaba ya que los traficantes de peloteros cubanos los someten a situaciones traumáticas. Desde un paso por Haití como una mercancía, hasta dormir en lugares insalubres. Marcos, como muchos peloteros cubanos, decidió regresar a Cuba y aunque difícil y tormentosa esta experiencia, no hay dudas de que el nivel de los muchachos aumenta considerablemente al regresar a suelo antillano.
Marcos cumplirá los 24 años próximamente. Es un talento joven y con ganas de pelear por un puesto dentro del equipo dirigido por Guillermo Carmona. De cara a la Serie Nacional número 61 los Leones necesitarán mejoras en el acápite del pitcheo y un brazo como el del joven lanzador sería fundamental para las aspiraciones de Industriales: Ganar la Serie Nacional Número 61.
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